Como canciones
tus palabras el recuerdo
me amanece

lunes, 28 de septiembre de 2009

El bergantín Lightning (II)

Siguiendo con la lectura del cuaderno de bitácora de bergantín de su Majestad Lightning, he creído interesante reproducir en estas paginas el episodio de su encuentro con los piratas árabes del indico.

"" 15 de Septiembre del año de nuestro Señor 1831. Próximos a doblar el cabo de Buena Esperanza hemos vuelto a divisar las velas triangulares de los piratas. Ante la imposibilidad de poder usar los cañones, fruto de la maniobras de nuestro anterior encuentro, decido preparar a la tripulación para el inminente abordaje, para lo cual les he reunido a todos en cubierta, y después de repartir las armas, desde el puente, les incite a ser valientes y dignos súbditos de su Majestad, y por supuesto al aseo diario, que todos juntos dan muy mal aroma al barco. Después de mi arenga Miss Federica Cobbler de forma imprevista se ha dirigido a los hombres, con un discurso directamente salido de su pecho, perdón, corrijo, enseñándoles sus pechos. En ese discurso Miss Federica, les incito a defender su virtud, lo cual produjo un efecto hilarante entre los hombres , que subió la moral unos grados. Desconozco si subió alguna otra cosa.""

"" 16 de Septiembre del año de nuestro Señor 1831. Con las primeras luces del alba, los dos barcos se situaron a distancia de abordaje. Miss Federica, en una acto e arrojo sin igual, tan solo vestida de un corpiño rojo, a tono con su pubis, que mostraba, recién rasurado. Se ha lanzado desde las cofas, al barco pirata, lo cual ha creado un considerable estupor entre el despreciable enemigo, que la siguió en tropel, a las entrañas de su barco, donde al final el día, en que escribo estas líneas, aun permanecen. Solo fue seguida en su heroico ataque por el cabo de mar, antes grumete, Peter Stake. He pedido al capellán de la nave, que rece por la virtud y el alma… de los piratas. Hombres malvados son, pero al fin y al cabo seres humanos""

"" 17 de Septiembre del año de nuestro Señor 1831. Al amanecer un tambaleante y ojeroso capitán de la nave pirata ha enarbolado la bandera de parlamento. Aparte de otros temas menores, como el traje de novia del timonel, el punto mas escabroso de la negociación fue la vuelta de Miss Federica a nuestra nave. Por fin llegamos a un acuerdo. A cambio de numerosas riquezas nos devolvieron a la doncella. Guardo las numerosas riquezas en la caja fuerte del barco, para su entrega al las autoridades navales a nuestra llegada a puerto. Sean ellas las que decidan su destino""

"" 18 de Septiembre del año de nuestro Señor 1831. Hemos reparado en la falta del cabo de mar Peter Stake. En la marina británica no se abandona a nadie. Y menos si deben tres guineas al capitán. Nos lanzamos en persecución de los piratas""

"" 19 de Septiembre del año de nuestro Señor 1831. Hemos alcanzado a los piratas. Les conmine a la entrega del cabo, pero se negaron, con lo cual me vi obligado a izar del palo mayor el corpiño de Miss Federica, provocando pavor entre los bucaneros, que al final accedieron a su entrega""

"" 20 de Septiembre del año de nuestro Señor 1831. Entrevistando al desgraciado Peter Stake, descubro con estupor que su permanencia en el barco pirata fue del todo voluntaria. Considerando este hecho como deserción, procedo a degradar al cabo de mar, Peter Stake, a fregona segunda, y a recibir 10 latigazos. Se cumple la sentencia inmediatamente recibiendo los latigazos con gran placer el primer timonel William Village, que se ofreció sustituir al desdichado Peter, por gusto, y por haberle devuelto el traje de novia de su madre, el cual llevaba puesto a su vuelta al barco el antes citado Peter Stake. No obstante y a pesar del intento de deserción, permito, en atención al heroísmo demostrado por el antiguo grumete, cabo de mar, y ahora segunda fregona Peter Stake, cambiarse el tatuaje de su pecho, quitando el nombre de Federica, por el de Abdul.""

Maximiliano

Resultas de una consulta de tipo etimológico recibida, he recordado al escritor mexicano Maximiliano Porelmismo cuya curiosa vida merece ser recordada y resumida aquí.

Maximiliano, nació en la pobre aldea de Chochopelao del estado mexicano de Chihuahua, famoso por sus fieros perros, en el año de de 1866.

Sus padres, bueno su madre, su padre desde su nacimiento no abrió la boca mas, le pusieron el nombre de Maximiliano en honor del emperador de México, que por aquellos tiempos gobernaba el país, Aunque según otras versiones fue a debido a su nacimiento, de nalgas.

Este nombre le trajo muchos problemas durante su niñez provocando las burlas de los otros niños de la aldea. Aunque dichas burlas también pudieron deberse al grito que dio su madre dirigiéndose al marido, entre dolores terribles de parto, al darle a luz.

“¡Jodio capón! Si llega a ser tuyo, te echo cristales en las enchiladas”

Muy pronto Maximiliano destaco por una cualidad, su ausencia olfato, cosa que no ocurría a los que le rodeaban, Le rodeaban siempre por poco tiempo.

Maximiliano siempre tuvo mucha afición por la milicia y los problemas sociales de sus compatriotas, enrolándose como uno de los primeros acólitos de Emiliano Zapata. Con el famoso revolucionario formo parte de la junta de defensa de la tierra, Aunque nuestro Maximiliano nunca estuvo “junto” sino en habitación aparte

A las ordenes de Zapata destaco en la guerrilla. Destaco entre las tropas federales que siempre sabían cuando les iban a tender una emboscada los zapatistas, obligando a estos a atacar siempre contra el viento.

Muy destacada fue su acción en el asalto al pueblo de Mingachica, el cual por orden directa del mismo Zapata, ataco en vanguardia el solo, diez minutos antes que el resto de la tropa.

Pasados los diez minutos, y ante el silencio reinante Zapata mandó avanzar las tropas, y al llegar al pueblo encontraron, con gran decepción, que Maximiliano seguía vivo y las tropas federales habían huido en desbandada, dejando armas y pertrechos.

Esta acción inspiro la celebre ranchera, cantada por ambos bandos, titulada “Maximiliano que marrano”

Expongo como ejemplo la primera estrofa

Maximiliano que marrano
Nadie tener a su mano
Si le huelen los valentones
Se les marchitan los cojones

En sus memorias Maximiliano contó que al llegar al pueblo fue encañonado, ordenándosele levantar las manos, y al hacerlo, se produjo la celebre desbandada de los 1500 federales

Maximiliano durante esos años de revolución y aventuras caso con la celebre guerrillera Lupita “la chata” llamada así por su ausencia de nariz.
Lupita destaco mucho entre la milicia, creemos que por su habilidad para encontrar fruta, Ya que su otro apelativo “la de los grandes melones” así nos lo hace suponer.

Una vez terminada la guerra Maximiliano se retiro a las montañas, a escribir tratados de estrategia militar, Esto coincidió con la huida de los indios que aun habitaban las montañas.

Bibliografía de Maximiliano Porelmismo:

El aroma de la revolución
Manos a la nariz (autobiografica)
Si me abandono el desodorante, andaleee
Olores de mi tierra natal (poesía)

domingo, 27 de septiembre de 2009

Seguidilla a la viexa usança

Por el pasillo largo
viene sádica
la enfermera trasgo
semexa moça
pero bruxa y mago
toda marrana
llega a mi de blanco
folgar herida
“vengo cambiar trapo”
temo por vida
aquesta hará daño
“tranquilo prenda
que solo te doy baño”
no, no serrana
que prometí ser casto
“es la herida
para lo que te lavo
que tocar picha
la de mi guapo novio
de Fuenlabrada
moço y mecánico”

La carniceria

Uno dos, tres…, los paneles fluorescentes pasaban a velocidad increíble sobre su cabeza, las ruedas de la cama hacían ruido a cada cambio de baldosa, todo le resultaba desagradable.

El chaval que empujaba la cama debió notar su contrariedad, y lo interpreto como miedo, sonrió, como diciendo, “veras como no pasa nada”

Ya no era miedo, el miedo había quedado atrás, ya no tenia miedo, lo que le fastidiaba era tener que ir tumbado en una cama arrastrado por un mozalbete, ¡pero si aun podía andar!, ¿porque puñetas le tenían que arrastrar?

Después de un corto descenso en ascensor, salieron a un pasillo helado, el color de las paredes había cambiado, eran azules. Azul mar de tormenta, azul olvido, la luz era mas tenue, y la mitad de las paredes cubiertas de frío acero inoxidable, tan frío como el ambiente, acero donde veía su reflejo tumbado en una cama, y todavía le hacia sentir peor. Verse tumbado, inútil, le reventaba

Y termino el viaje, junto a otras tres camas vacías.

Ahora vendrán a buscarle para meterle en el quirófano – dijo el mozalbete de la sonrisa estupida.

Le odió

Y allí se quedo esperando, en el silencio

Sin saber de donde venia comenzó a oír a una chica que hablaba por un teléfono, debía ser eso, puesto que solo le oía habar a ella

- Debe ser alguien importante - oí que decía
- No veas que cara se le quedo
- A mi me a igual

Y mas frases sueltas, con las que no conseguía captar el sentido de la conversación, pero decidió que debía ser una chica guapa, ¡seguro!

Y tenia razón, lo era, Apareció por fin, le saludo, y empezó a empujar la cama hacia el quirófano. Le sonrió a modo de saludo. Él se fijo en la redecilla con la que recogía el pelo, era de vivos y múltiples colores.

Una vez ya dentro del quirófano, aparecieron nuevos personajes, a destacar el anestesista, un tipo enorme con sonrisa de sádico, el cirujano al que ya conocía , otra tipa indefinida tras el gurka quirúrgico y otros mas que ni se fijo , y entre cuatro se dispusieron subirle a al mesa

Y se negó, ¡vamos! que el solito podía, ni que fuera aun un invalido, y menos delante de una chica tan atractiva, así que se levanto como un rayo, y solito, se subió al hule. Sin darse cuenta que estaba desnudo, lo cual, cuando reparo en ello le supuso mas humillación.

Y la chica le coge la mano. - Que amable, para darme ánimos – le paso por la cabeza

No le dio ni tiempo a sonreír. Le clavo con saña una aguja enorme

Luego le dieron la vuelta y mientras el anestesista sádico decía:

- Ahora es importante que no te muevas

- Si ya se, cacho animal. Si me pinchas mal me dejas paralítico - pensó

Y comienza el “destripe” no sin antes, tener la deferencia de poner una barrera para que no contemplara la carnicería.

Cosa inútil, se reflejaba todo en el foco del techo, así que decidió mirar a la chica bonita, de la cual ya solo veía, los oscuros ojos, mas atractivos todavía por la edad, que debía ser mas o menos la suya

Y sintiéndose fuerte, y queriendo demostrar lo tranquilo que estaba, lo machote que era, dijo:

- Que mirada mas bonita tienes

Y entonces el cirujano carraspeo, y con un instrumento brillante en la mano, dirigiéndose a el, dijo:

- Te advierto que es mi mujer

En ese momento decidió perder el conocimiento…

miércoles, 23 de septiembre de 2009

La cancion de la selva

En el último viaje por las sabanas, en busca de datos sobre nuestra vieja amiga, la gentil Federica, llego a mis oídos una canción que cantaban con reverencioso temor los ancianos de las tribus.

En un principio pensé que tenía que ver con nuestra protagonista ya que el canto se acompañaba de un baile en el cual los celebrantes se levaban las manos a la zona trasera

Una vez traducida, comprobé que no tenia nada que ver con la celebre doncella Fo-ma-na

Pero aun así, por su verdadero interés etnográfico la reproduzco en estas páginas

Dice así:

Tionorme
an-al dumbo
dumbo na-nai
na-pia pre-ta
unc ulo

Y su traducción:

En el África Oriental había un gigante
que le quiso dar por culo a un elefante
El elefante que no era del oficio
Con la trompa se tapaba el orificio

lunes, 21 de septiembre de 2009

La sensacion

Sobre el frio hielo avanzaban, toda la excitación posible puesta en su cara amoratada por el aire polar.

No sabia si esa excitación era producida por los ladridos de los perros, o la sensación de inmensidad blanca que le rodeaba

Seguían avanzando, avanzando, sin cambios, el ruido de la nieve aplastada era como su propios latidos, algo ya suyo, algo intimo, algo necesario, no podía concebir su no presencia

- Hop! Hop! – gritaba a los perros, no había que parar, nunca parar

Su pensamiento estaba helado, blanco, inmenso, nada le distraía, nada era importante, solo avanzar, y avanzar, mas al norte, mas cerca, mas lejos.

Cuando ya todo parecía olvidado, cuando ya no sentía ausencias y presencias, llego

Al principio como un olor, una aroma tenue, nada mas

Pero la sensación se fue haciendo mas fuerte, se le empezó a meter en la cabeza, un deseo, el deseo

Y le deseo le recorrió todo el cuerpo, hasta hacerse doloroso, ya los patines sobre la nieve solo cantaban ruidos estridentes, odió a los perros que no paraban de ladrar, y el blanco le daño los ojos.

Paró – ¿que me pasa? – pensó

Los perros le miraban esperando nuevas ordenes

Un remolino de nieve antigua le azoto la cara, nada, seguía sin saber que le pasaba, que era ese dolor imaginario que le torturaba, que le impedía volver al albo catatonico.

Un sabor antiguo le llenaba la boca, trato de quitárselo con un puñado de nieve. Solo consiguió que un frío dolor le perforara el paladar

La sensación seguía allí.

Ya no llegaría al cabo norte, ya no vería el mar helado,

Miro atrás, aun podía distinguir la taiga

Y al mirar atrás descubrió lo que le pasaba, identifico el imaginario aroma que le hacia morir de deseo, de ganas. ¡hay que volver!

- ¡Hay que volver!, como deseo una tortilla de patatas -

………con cebolla

sábado, 12 de septiembre de 2009

La lanza

Hace unos años, bastantes, me invitaron a la boda de un viejo amigo, en Kenia, uno que es original, y en vez de amigos en Mostotes, los tiene en Kenia.

Y allá que me fui, con mi compañera de esos tiempos, así de paso le llevaba de viaje exótico, y quedaba como un rey.

A la vuelta se encapricho de llevarle una lanza a su hermano, compramos una muy chula, y además autentica, para algo tiene uno amigos en Kenia, casi dos metros de lanza, y una punta que daba miedo.

Al llegar al aereopuerto, naturalmente había que facturarla, semejante pincho no se podía meter en el avión. Le pusieron un lacito con la etiqueta.

Ya en Madrid, esperamos el equipaje, llega todo, todo menos la dichosa lanza.

Nos dirigimos al mostrador de reclamaciones, y se produce mas o menos este dialogo, mas o menos, que ya han pasado muchos años:

- Buenos días, nos falta una parte del equipaje.
- Tienen el comprobante – dice la señorita que nos atendía

Se lo doy

- Vera, este bulto no tenia que venir a Madrid
- ¿Cómo?
- Pone AMD y debería poner MAD. – Me dice sonriendo
- ¿Y eso de AMD, que es?
- Amsterdam, esta en Amsterdam
- ¿Y ahora que hacemos? señorita
- Pues lo pueden reclamar
- ¿Y eso como se hace?
- Se lo hago yo – dice muy amable

Me empieza a pedir los datos, y yo a dárselos, y cuando llegamos a la descripción del “bulto”

- ¿Cómo es la maleta? – pregunta
- No es una maleta, es una lanza
- ¿Cómo? – cara de sorpresa y no entender nada
- Si, una lanza, una lanza Massai
- Me podía darme una descripción del “objeto” – yo creo que no se atrevía a decir lanza
- Pues una lanza, un palo con un pincho al final
- ¿Tamaño? ¿Largo, ancho?
- Pues casi dos metros, y ancho… pues una lanza…

Y así quedo la cosa, nos fuimos con nuestra reclamación,

Un par de semanas después, me llaman:

- Buenos días, ¿Don Rafael xxxxx?
- Si, soy yo
- Le llamo por una reclamación de equipajes que realizo
- Si
- Ya lo hemos localizado
- Muy bien, cuando lo traen, lo digo por estar atento
- Esta en Amsterdam - dice como si fuera en el portal de al lado
- Eso ya lo sabia yo – digo molesto
- Es que hay un problema, lo han calificado de mercancía peligrosa, y o lo envuelve usted, o paga una tasa/seguro para poder traerlo
- ¿Peligroso? Pero si es solo una lanza
- Perdón, ¿que me dijo que era?
- Una lanza

Note una risa contenida

- Pues tendrá usted que embalarla para que no sea peligrosa – me dice
- ¿Y que hago? Me voy a Amsterdam
- No claro, pues tendrá que pagar el seguro
- ¿Y como hago eso?
- Debe usted ir al aeropuerto, llevando el resguardo y en el mostrador de reclamación de equipajes, abonarlo.
- ¿Y cuanto es?
- Pues no le puedo decir, depende del tamaño y el peso, eso se lo dirán en el mostrador.

Consulte con mi compañera de aquellos días, y decidimos olvidarnos de la dichosa lanza, solo por no tener que volver a describir el “pincho” merecía la pena olvidarse.

Un par de años después, o así, cuando ya la compañera de esos tiempos ya no era compañera, llaman al telefonillo…

- Buenos días, le traigo un paquete del aeropuerto
- Suba

Yo ni idea que era, ni me acordaba

Abro la puerta, y allí esta, un mensajero lanza en mano, como un moderno legionario romano de la legión Vitrix-Seur.

Hoy, casi 10 años después, buscando una cosa en el trastero, la dichosa lanza, el pincho infame, que apoyada estaba en una esquina, se desploma, y me ha hecho un pequeño corte.

¿Será una maldición Massai?

martes, 8 de septiembre de 2009

Soy un hamster

Toda la vida fue un hámster, no es que le gustara ser hámster, pero como no tenia opción se tenia que conformar.

Su vida trascurría dentro de una jaula, y era una jaula grande, sin demasiados aprietos. La comida era buena y abundante, dos clases distintas de pienso, lechuga, a veces patatas fritas, otras, trozos de queso, un festín. Tan abundante era la comida, que podía dar rienda suela a su mayor pasión, el ahorro, menuda despensa tenia debajo del colchón, pipas, maíz, trocitos de pienso, solo pensar en ello le hacia feliz.

Sus días eran monótonos sin sobresaltos, conformados.

Pasaba la mañana durmiendo, a eso del medio día se desperezaba y organizaba la despensa, había que tenerla siempre controlada, que nunca se sabe, Y después volvía a dormitar un rato, hasta la llegada de los niños, que le sometían a la habitual sesión de sobeteos y apretujones. No es que le agradara, en absoluto, pero le permitía dar un paseo, ver paisajes nuevos, Era como los viajes organizados de los humanos, apretujones sobeteos, transportados de un lado otro sin saber su opinión, pero al fin y al cabo, viajes.

Y llegaba la noche, la noche era suya, su intimidad.

Comenzaba con una larga sesión de rueda, lo cual tenia dos virtudes, hacia ejercicio, y ruido, le daba la sensación que el ruido molestaba a los humanos, era su humilde venganza, por los sobos, eso le hacia sonreír.

Cuando ya agotado paraba, comía algo, y se daba una buena ronda de rascaditas y acicalamientos, prestando especial atención a sus partes, no sabia porque, pero le daba mas gustito que en otro sitio, el no había conocido jamás a otro hámster, y el recuerdo de sus hermanos, de su infancia, ya solo era una nube lejana.

Un día los humanos le dejaron en la ventana para le que le diera el sol, y un pájaro se acerco, se poso junto a El.

- Hola – dijo el pájaro – ¿tu que eres?

- Un hámster, ¿y tu?

- Un gorrión – respondió el ave, con el descaro habitual de los gorriones - pues pareces una rata psicodélica, y sin rabo. ¿Me das una pipa?

- Nooo, son mías, las podría necesitar.

- Pero si tienes muchas, ¡rata tacaña!

- Ya, pero nunca se sabe – dijo el, todo mohíno – pero si me cuentas que son esas ratas, te doy una

Y el gorrión le contó que las ratas viven en las alcantarillas, en bandas y familias, que salen todas la noches a buscar comida, que pasean, husmean, y a veces cuando encuentran fruta pasada, o algo de cerveza se corren unas juergas bárbaras. Y muchas mas cosas fascinantes le contó el gorrión sobre sus primas, las ratas

El hámster quedo tan estupefacto por la vida de las ratas que no solo le dio una pipa, sino tres, con tal de que siguiera contando.

Pero su vida cambio, dejo de correr en la rueda, dejo de acicalarse, e incluso controlaba menos la despensa.

En su cabeza solo un pensamiento, las ratas, unirse a ellas, escapar, no le importaba que tal como le dijo el gorrión, su final fuera morir con terribles hemorragias internas, causadas por el veneno de los humanos, quería ser rata, ser libre.

Y un día escapo, los niños humanos dejaron la puerta mal cerrada, espero hasta la noche se lleno las bolsas de pipas, y escapo.

Y corriendo como jamás había hecho, hasta casi sangrarle las patitas, llego donde las ratas

- Hola ratas – dijo feliz – soy un hámster, ¿puedo quedarme con vosotras?

Y esa noche hubo gran juerga en casa de las ratas, comida abundante y baile, ¿Y el plato principal de la comida?… hámster… con pipas

Se llamaba Rodolfo, y era un hámster

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Alguien me dijo, creo que no fui yo, pero no estoy seguro, que ser gordo y feo es una ventaja, y encima tuvo la desfachatez de argumentármelo, y bien por cierto.

Sin entrar en los argumentos escatológicos, me dio uno, que hasta casi me convence, ¡Pues no me dice que siendo gordo, feo, y pobre, si alguien esta contigo es a causa de que te aprecia como persona! Y yo que estaba con la neurona puesta en el España-Chile, dije que si, que visto así, tenia razón.

Pero no, no la tenía.

Que te “aprecien como persona” comporta unas obligaciones casi insuperables, te obliga a hablar con ella, a ser atento, cordial, e incluso afectuoso. ¡Tremendo!

En cambio si eres guapo, y solo te quieren por tu cuerpo o/y dinero, Pues perfecto, con cumplir como un campeón cuando toque, y si acaso comprarle un pedrusco de medio kilo, lo que además comporta el poder vacilar a la dependienta de las pedrusquerias que siempre están de buen ver. Esta todo hecho.

Por cierto… estoy a régimen…