Como canciones
tus palabras el recuerdo
me amanece

jueves, 30 de abril de 2009

El libro favorito

Me preguntan “¿Cuál es mi libro favorito? ¡Y yo que se!, Hay tantos, hay tan pocos.

¿Mi favorito cuando? ¿Mi favorito para que?

A lo mejor se refieren a mi favorito para sujetar la puerta, y no de un portazo, para eso mi propia tesis doctoral, un mamotreto que ni los huracanes mas fuertes son capaces de mover.

Mi favorito, cuando me siento mal, y me quiero sentir peor, “El corazón de las tinieblas” de Joseph Conrad

Y si quiero poner uno de aventuras, pero dandome las de muy culto. “La Anábasis” de Jenofonte.

Para parecer un chico sensible y dulce, cosa que no soy, pondría ese libraco, no apto para diabéticos, “Cien poemas de amor y una canción desesperada” de Pablo Neruda.

Pero si quiero ser considerado como un culto hispanista, diría que cualquiera de Quevedo, (ese si que me gusta de verdad).

Pero si es ficción ¿El Lazarillo de Tormes”? Ese también me gusta.

Claro que no todo van a ser autores muertos, ahi va uno de espías, “Calderero, Sastre, Soldado, Espía” de John Le Carre,

Ahora, eso si, si tuviera que recomendarle uno a mi hijo, y quizás, este si sea mi favorito, “La Isla del Tesoro” de Stevenson

En definitiva, es tan difícil decidir que es lo que a uno le gusta, que mas que una pregunta para conocer los gustos de alguien, se trata mas de hacer una declaración de intenciones.

¿Y cuales son mis intenciones? Pues eso ya es otro tema. Y eso si que puede ser enrevesado.

miércoles, 22 de abril de 2009

Los cambios. Demasiadas preguntas

A veces los humanos, en mi opinión, tenemos la fútil idea de que la gente puede cambiar, de que nosotros podemos cambiar, que por mí, por nosotros, alguien puede cambiar.

Por otra parte, puede que si, que ante los ojos de los “otros” alguien cambie.

¿Pero realmente cambio? ¿O simplemente mostró otra faceta de la compleja personalidad que a todos nos acompaña?

¿Alguien lo sabe?, yo no tengo respuesta.

¿Y si alguien cambia realmente?

Entonces ese sujeto, ya nos seria la misma persona, que tal vez era nuestro amigo, o nuestro amor.

Pero me surge otra pregunta, cambiamos para adaptarnos a la persona que tenemos al lado, porque quizás es lo que ella desea, pero entonces, ¿No seriamos “algo” distinto de lo que nos hizo estar con ella? ¿O es que ella (la persona) estaba con nos, para modelarnos, y ese era su interés?

¡Es mas! Los dos cambian, los dos ceden un poco, para ajustarse el uno al otro, pero eso no es un cambio, es una adaptación, en el fondo, son lo que son, no hay cambio. Tarde o temprano, o solo en forma de destello fugaz, volverán a ser lo que eran. ¿O no?

Demasiadas preguntas, ninguna respuesta, al menos que yo sepa

Lo que si puedo decir, lo que si voy a hacer es cambiarme… cambiarme de ropa interior, que ya es hora.

"Cada día, y con ayuda de los dos aspectos de mi inteligencia, el moral y el intelectual, me acercaba más a esa verdad cuyo descubrimiento parcial me ha llevado a este terrible naufragio y que consiste en que el hombre no es sólo uno, sino dos. Y digo dos porque mis conocimientos no han ido más allá de este punto. Otros vendrán después, otros que me sobrepasarán en conocimientos, y me atrevo a predecir que al fin el hombre será tenido y reconocido como un conglomerado de personalidades diversas, discrepantes e independientes. .../...
La primera, porque he aprendido que cada hombre carga con su destino a lo largo de toda su vida y que cuando trata de sacudírselo de los hombros le vuelve a caer con un peso aún mayor y más extraño. Segundo, porque, como dejará bien a las claras mi relato, mis descubrimientos han sido, por desgracia, incompletos. Bastará con que diga que no sólo aprendí a distinguir mi cuerpo material de la emanación de ciertos poderes que componen mi espíritu, sino que llegué a fabricarme una pócima por medio de la cual logré despojar a esos poderes de su supremacía y sustituir mi aspecto por una segunda forma y apariencia no menos natural para mí, puesto que constituía expresión de los elementos más bajos de mi espíritu y llevaba su sello."

Robert Louis Stevenson (1850, 1894) El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde
"Primero, pues, la avaricia, luego fue creciendo la ambición, y estos dos fueron como la masa y material de los demás vicios. Porque la avaricia echó por tierra la buena fe, la probidad y las demás virtudes; en lugar de las cuales introdujo la soberbia, la crueldad, el desprecio de los dioses, el hacerlo todo venal. La ambición obligó a muchos a ser falsos, a tener una cosa reservada en el pecho y otra pronta en los labios, a pesar de las amistades y enemistades, no por el mérito, sino por el provecho, y, finalmente, a parecer buenos más que a serlo. Esto en los principios iba poco a poco creciendo y una u otra vez se castigaba; pero después que el mal cundió como un contagio, trocóse del todo la ciudad, y su gobierno, hasta allí el mejor y más justo, se hizo cruel e intolerable.

Pero al principio más estrago que la avaricia hizo en aquellos ánimos la ambición, que, aunque vicio, no dista tanto de la virtud, porque el bueno y el malo desean para sí igualmente la gloria, el honor y el mando. La diferencia está en que aquél se esfuerza a conseguirlo por el camino verdadero; éste, como se halla destituido de mérito, pretende por rodeos y engaños
"

Cayo Salustio Crispo (86 AC. - 36 AC.) La conjuracion de Catilina

No todos los politicos son iguales, Los hay "buenos" y "malos". Cada cual que decida quienes son estos o los otros, y se lo aplique a "suyos".

Yo lo tengo claro.

miércoles, 15 de abril de 2009

Las Ranas

Esquilo pregunta a Baco referiendose a Euripides

"¿De qué crímenes no es autor? ¿No ha puesto en escena alcahuetas, mujeres que paren en sagrado , hermanas incestuosas , y otras que dicen que la vida no es la vida? Así es que nuestra ciudad se ha plagado de escribanos y bufones, especie de monos que tienen al pueblo constantemente engañado; mientras que ya nadie sabe llevar una antorcha ; por falta de ejemplo."

Aristofanes, Las Ranas año 406 AC

Dedicado a Almódovares, Bardenes, Sindes, y demás "cejeros", que se creen “modelnos” por hacer lo mismo que hacían otros con mas talento, hace 2,400 años

martes, 14 de abril de 2009

Injusto

Estuve reflexionado.

Reflexionado sobre mi anterior historia, y creo que he sido injusto, muy injusto.

Tal vez si la Ana de mi historia no tuviera que ocuparse todo el día de una casa, de un niño, de una Susi, adolescente, saturada de hormonas.
Tal vez si la hipoteca no les agobiara, no tendría que llevar chándales de 9 euros. Y podría tener esa bata de seda semitransparente
Tal vez si durante el día alguien le pusiera una sonrisa en su cara, no tendría porque mirar Los Hombres de Paco.
Tal vez si Ana, tuviera tiempo para si misma, si los años, los niños, las lavadoras, las pelusas de los rincones, no hubieran pasado por ella como una apisonadora, Ana seria esa mujer sensual que describe, y seguramente lo es.

Perdóname, Ana Imaginaria, he sido injusto contigo.

Y ahora el que se rasca el culo y se va leer el Marca soy yo, Es mi justa penitencia

sábado, 11 de abril de 2009

¿Que llevas puesto ahora?

Mas preguntas del intesnes

¿Que llevas puesto ahora?

Esta ya es de traca, ¿a que se referirán? ¿Será puesto de algún tipo de alucinógeno, o bebida espirituosa? ¿La ropa? ¿Toda?

Y entonces imagine:


< Ana, estaba frente al ordenador, rellenaba la encuesta, había llegado al net invitada por una conocida del chat, que por cierto, le caía fatal.
Al llegar a la pregunta “¿que levas puesto ahora?” comienza a escribir:

“Una leve bata de gasa semitransparente, sobre mis hombros desnudos…”

En ese momento se levanta de la silla, se ajusta el chándal color rosa helado Frigo, que compro por 9 euros en el carreflus, y grita:

- Mariooooooooooooo quieres dejar de una puñetera vez la nistesdo e irte a la cama que mañana hay colegiooo-

Volvió al ordenador, y siguió escribiendo:

“… sobre mis caderas una pequeñas braguitas de color negro que apenas tapan nada. Mis largos cabellos caen sobre mis hombros, un leve brisa recorre mi cuerpo, y hace que se marque el pecho, por debajo de la bata, como dos perlas…”

Se volvió a levantar, y se dirigió al cuarto de estar:

-Manuel, quieres dejar de ver la tele y ocuparte del niño, y te he dicho mil veces que no te sientes en calzoncillos en el sofá, que luego me paso la mañana con la “vaporesta” para quitarle el olor-

Se dirigió al baño, unos de los rulos de su pelo se había soltado con tanto movimiento,

-Susiii ¿Qué coño haces tanto tiempo metida ahí? No se te ocurra usar mi maquinilla, que me la llenas de pelos y la necesito para afeitarme los sobacos-

Volvió al ordenador y siguió escribiendo:

En mis piernas unas medias, con liga…

En ese momento dejo de escribir. Empezaban “Los Hombres de Paco”

Ya mas tarde, en la cama, rodeada de los ronquidos de su marido, Ana sueña…

“A ver si este, me compra una vaporeta de esas con aspirador, será tacaño., como este sábado no la compre se va a quedar, por mis muertos, un mes sin foll…”

Se dio la vuelta, y también ella comenzó a roncar

……….

Al otro lado de internes, de los bits, de las pantallas, un hombre lee la entrevista de Ana, y sueña con al chica que describe el perfil, por fin encontré a alguien sensual.

Puso que su libro favorito es "Les Fleurs du mal" de Charles Bodelaire, apago el ordenador, se rasco el culo, y se puso a leer el Marca>

viernes, 10 de abril de 2009

El peso

Y ahora me preguntan por...

El peso

¡Pero como pueden preguntar eso! Si es una invitación al embuste, y como mínimo una grosería.

Pero siempre puedes no contestar, pero casi es peor, ¿no contestas por que pesas mucho, o poco? Lo dicho, una grosería

Pero se me ocurre una situación.

Presentemos a los personajes

Genaro, varón, soltero, 48 años, vive con su madre en el pisito de un barrio de los años 60, en una gran ciudad, funcionario del ayuntamiento, peso declarado en la encuesta: 87 Kg.

Hortensia, mujer, divorciada (a causa de la tradicional amistad hispano cubana) 44 años, vive sola en una mediana ciudad de provincias, ama de casa, peso declarado en la encuesta 56 Kg.

Ambos odian la mentira

Se conocieron a través de estas páginas, y durante meses charlaban, largas conversaciones, pero con solo tres temas, a saber:

• Que como es ella
• Lo que espera Genaro de una mujer
• Lo delicada que esta la madre de Genaro

El le envía casi todos los días poesías, llenas de miel y “amada mía”, cuando no se le ocurre ninguna, fusila a Neruda, o a Octavio Paz que son muy socorridos para estos casos.
Ella que la única poesía que recibió de su exmarido fue la lista de las cosas que quería llevarse en la maleta a Cuba, a ese viaje de “negocios, para promocionar el rico queso local. Esta encantada.

Después de unos meses así, por fin deciden conocerse. Naturalmente es Hortensia quien viaja a la ciudad de Genaro, Es que su madre esta muy delicada, y no quiere dejarla mucho tiempo sola.

Cuando ella llega a la estación se produce la siguiente escena

El esta en el anden, una bolsa de deportes en la mano, jersey de rayas, que le queda algo corto.
Ella baja del tren y le ve, sonríe, y aunque esta mas calvo de lo que esperaba, no importa.

GENARO- Hola Hortensia, ¿Qué tal el viaje?
HORTENSIA- Bien, se me hizo largo, tenía ganas de llegar,

Ella no sabe si darle la mano, o un beso. El ni se inmuta, las manos colgando flácidas a sus costados, la bolsa junto a pierna.

GENARO- He traído una cosa.
HORTENSIA- ¿Siiiii?

El se agacha, mete la mano en la bolsa,… y saca una báscula, de las de baño. Ella piensa: - Que bromista es- y sonríe

GENARO-Anda súbete
HORTENSIA - ¿Para que? – pero aun sonríe, que bromista es
GENARO- ¡Sube!

Ella mira a su alrededor, un poco a avergonzada, y sube…

La báscula da el peso, ¡58 Kg!

GENARO- ¡Me has mentido! Sabias que odio las mentiras

Ella ya no sonríe

HORTENSIA- Pero Genaro, si es que ayer me comí unas fabes con almejas que hizo mi hermana.
GENARO- ¡es igual! Debías habérmelo dicho
HORTENSIA- Es que también me opere el pecho, 400 gramos en cada una, como decías que te gustaban las mujeres con el pecho grande, quería darte una sorpresa.
GENARO- Una mentira es una mentira, ¡Adiós! Mira que dejar a mi madre sola para esto.

Guarda la bascula, coje la bolsa, y se va.

Ella aun no puede creerlo, se sienta en un banco de la estación. Se descalza un zapato, -¡uff! Que daño me hace, como son nuevos, los compre ayer para venir.

Cuando se le pasan algo las ganas de llorar piensa:

-En cuanto vuelva a mi pueblo me meto puta. que en eso al menos solo te preguntan el precio, y los euros no se pesan-

¿Que odias?

Me preguntan al abrir un perfil...

¿Qué es lo que mas odias?

El odio es un sentimiento transitorio, y además, varia de un momento a otro, lo mas correcto seria que cada vez que conectaras te lo preguntara, así se podría responder cosas que realmente odias. Como la factura del teléfono que te ha jodido la cuenta del mes, y estas jurando que no llamas más a nadie, por muy buena que este. O a mi hija, que es lo que mas quiero junto con su hermano, pero que recién termina de realizar una obra de arte en la pared del salón, o peor aun, cometió la desfachatez de interrumpirte mientras chateabas con Charlize Theron, que acabas de conocer en una red social, por cierto que bien se expresa esa chica en castellano, ni que fuera de Mostoles.

Pero la gente responde, y claro, ante una pregunta tan “absoluta” responde con categorías absolutas. Y mucha, mucha gente responde lo mismo, La Mentira.

Como se puede odiar la mentira en general, si así fuera, no podríamos ni salir de casa, en el felpudo de la puerta de enfrente pone, “bienvenidos” mentira cochina. Ni levantarnos de la cama, hasta el despertador miente, pone las 7:30, y ni de coña, las 7:25.

Hay muchas clases de mentiras, y seria largo desglosarlos todos, pero así a grandes rasgos, están las mentiras propiamente dichas, y los embustes.

Un embuste es cuando dices que tienes un Ferrari, (yo lo tengo, ¡ah! ¿No me creéis? que curioso) y realmente lo que tienes es un Toyota de siete años con mas golpes que Legra.
Un embuste no hace daño a nadie, salvo a ti mismo, o en este caso si eres una apasionada/o de los Ferrari y te lo haces con todo el que tenga uno.

Una mentira, una gran mentira es aquella que falsea tus sentimientos, que engaña sobre lo que tu ves en otras personas, o sobre tus intenciones, o sobre la realidad de una situación. Esas mentiras si pueden dañar.
Pero nunca en mi opinión se puede odiar a todas, odiaras esta mentira, o aquella, Hay mentiras que hacen feliz, hay mentiras que hacen que la vida de alguien tenga sentido, hay mentiras…

La carretera

La carretera era estrecha llena de agujeros, podía ser una carretera africana cualquiera. Unas decenas de metros mas adelante, unos sentados, otros de pie charlaban y reían un grupo de muchachos. Quien sabe cual era el tema. ¿Chicas? ¿Fútbol? Supongo que cualquier tema común a muchachos de esa edad.
El mayor de todos, apenas tendría 18 años se mantenía un poco separado del grupo, los miraba y sonreía, con una sonrisa llena de interminables dientes blancos, una sonrisa que inspiraba confianza, a la cual deseas estrechar la mano y ser su amigo.
Tan agradable era la escena que al principio no se reparaba en dos figuras oscuras, puestas de rodillas y con las manos atadas a le espalda. Mayores que cualquiera de los muchachos que reían un poco mas allá, dos hombres, uno de ellos tenia la mirada perdida, la cara seria como contraída, el otro no paraba de hablar, llorar, y suplicar a los muchachos.
Uno de los muchachos, paro de reír, no era ni el mas joven ni el mas mayor ni el mas alto ni siquiera el más alegre, o triste, se separo del grupo. Como una leve ráfaga de viento se oyeron dos descargas del fusil de asalto, y las dos figuras arrodilladas desaparecieron en la maleza de la cuneta.
El muchacho volvió a al grupo y continuo las risas en compañía de sus amigos. Todos seguían riendo, nadie había reparado demasiado en lo ocurrido.
Todos no, el mayor, el de la bella sonrisa, ya no sonreía, solo miraba. Miraba al muchacho que había dejado de reír por un momento.
Le miraba
Había decidido cual seria su próxima víctima

Septiembre 2003

jueves, 9 de abril de 2009

Las mascotas

Por estos lares de "intesnes" a veces se pregunta por la mascota favorita...

Perros, gatos, loros, iguanas, suegras, maridos, y hasta un pirado puso el grillo, todo vale como mascota, casi todos y todas, ponemos algo, al fin y al cabo, el poner un animalito en la vida, es neutral, y da una buena imagen.

Yo que he tenido toda clase de bichos, de dos, cuatro, y mas patas. De tres no, ¡Eh!

El perro: buen compañero, cariñoso, fiel, y en muchas ocasiones lo acompañan de la frase “Cuanto mas conozco a la gente, mas me gusta mi perro” pero… como dijo la famosa filosofa argentina Mafalda, “¿Alguien le ha preguntado al perro?”.

El gato: que belleza de animal, siempre elegante en sus movimientos, limpios, e independientes, se dejan acariciar, mimar, alimentar, y solo rara vez o nunca, te molestan con manifestaciones del mismo cariño que les profesas. Como una pareja que tuve yo, exactamente igual, y también ella tenia unos ojos tan bellos como los de un gato, y fríos

Hurones: ¡Ay mi pobre hurón! Siempre jugando, siempre durmiendo, siempre soñando con cazar conejos, era como la imagen animal de mi mismo, aunque yo huelo mejor. Pero tuvo el mal gusto de hacerse viejo y morirse. No me gusta perder amigos

Las serpientes: llegas a una casa, y el dueño, en plan machote, te enseña una magnifica serpiente coral, en una urna, a continuación te muestra los antídotos, que debe tener siempre a mano, que le costaron una fortuna, y que por supuesto están caducados, si le muerde es hombre muerto, que machote. Es mas, si le caes bien al dueño, te enseña como come el animalito. Le echa una pobre rata blanca, la serpiente le muerde, y puedes contemplar su agonía entre convulsiones, ¡que machote!

Etc. etc.

Pero del animalito del que nadie se acuerda, el que nadie cita, ese que mas íntimamente va unido a ti, que comparte contigo la intimidad de momentos de placer, ya seamos solos, en compañía de otra/o. Ese animal que acompaña a la especie humana desde el principio de los tiempos sin que nadie le domesticara, sin obligación, tan solo a cambio de calor, y un poco de comida. ¡Nadie se acuerda de ella! Nadie se acuerda de la LADILLA

domingo, 5 de abril de 2009

El corazon de las tinieblas

"La selva había logrado poseerlo pronto y se había vengado en él de la fantástica invasión de que había sido objeto. Me imagino que le había susurrado cosas sobre él mismo que él no conocía, cosas de las que no tenía idea. Al quedarse solo en la selva había mirado a su interior y había enloquecido. El denso y mudo hechizo de la selva parecía atraerle hacia su seno despiadado despertando en él olvidados y brutales instintos, recuerdos de pasiones monstruosas".

"Veía el Campo y aquellos hombres que caminaban sin objeto por el patio bajo los rayos del sol. Caminaban de un lado para otro con sus absurdos palos en la mano, como peregrinos embrujados en el interior de una cerca podrida. La palabra comida permanecía en el aire, en los murmullos, en los supiros. Un tinte de imbécil rapacidad coloreaba todo aquello, como si fuera la emanación de un cadáver».

Joseph Conrad El corazon de tinieblas

El horror, el horror tiene cara y ojos, huele, respira, y una vez lo has mirado, lo has olido, te acompaña siempre, mirandote, recordandote vigilandote.................el horror............................el horror

jueves, 2 de abril de 2009

El 19 de Enero de 1999

El 19 de Enero de 1999, era una ..... ¿fría mañana?, Pues claro, era enero. El despertador sonó con la estridencia acostumbrada invitando a lanzar un juramento.
Aun era noche cerrada, las estrellas tintineaban bajo el oscuro cielo.
Salí de la cama, muy lentamente, como si una misteriosa fuerza me retuviera ella, no obstante haciendo un supremo esfuerzo de voluntad, me incorpore
Sin ser consciente aun de lo que pasaba, me dirigí a tientas al cajón de los calzoncillos, tome uno. Al cerrar el cajón calcule mal la fuerza e hizo un ruido inopinadamente intenso
De la cama surgió un sonido gutural, como si viniera de otra dimensión donde no existieran las horas, ni las estaciones, un sonido... y un juramento.
Que detalle pensé yo, ¡tan temprano y acordarse de su suegro!.
Lentamente me dirigí al baño, sin aun darme cuenta la desgracia que se avecinaba
.......

Cogí el instrumento, el frío acero brillo a la luz de los halógenos como si sonriera pensando en el drama que comenzaba.
Con él en mis manos temblorosas cada vez mas consciente de lo que iba a hacer me dirigí a la habitación.
Una vez allí me senté al mismo borde de la cama, para reflexionar por ultima vez sobre lo que iba a cometer.
Ya era algo inexorable
.........

El 19 de Enero de 1999, me corte las uñas de los pies